Descubre los pueblos de la Taha de Pitres

Seguro que todos habéis oído hablar en alguna ocasión de localidades Alpujarreñas tan conocidas como Lanjarón (famosa por sus aguas medicinales), Órgiva (la internacional capital de La Alpujarra), Trevelez (el municipio más alto de España y la cuna de sus apreciados jamones), o cualquiera de los pueblos que jalonan el barranco de Poqueira (Pampaneira, Bubión y Capileira). Todas estas poblaciones son bastante turísticas y seguramente sería el primer destino de interés cuando se aterriza en esta tierra. Pero hay que decir que La Alpujarra está compuesta por multitud de pueblecitos con encanto por descubrir que se extienden en las estribaciones sur de Sierra Nevada y entre las provincias de Granada y Almería.

Centrándonos en la provincia de Granada, hoy me gustaría hablaros de La Taha de Pitres.

La Taha es una división administrativa de herencia nazarí. En este caso se compone de 7 pueblos que comparten ayuntamiento y servicios públicos, y que, en total suman una población censada de poco más de 800 habitantes. El municipio de La Taha se ubica en la Alta Alpujarra granadina, en la ladera sur de Sierra Nevada entre los barrancos Bermejo y de la Sangre, su cota más alta se encuentra en tomo a los 2.400 m y la más baja apenas a 500 m.
Comprende siete poblaciones: Pitres, Capileirilla, Mecina Fondales, Mecinilla, Fondales, Ferreirola y Atalbéitar. De ellos el grueso de la población se concentra en Pitres. El resto de los pueblos se encuentran localizados al Sur de Pitres a un lado u otro del Río Bermejo a excepción de Capileirilla que queda más alto. La fisonomía de estos pequeños núcleos urbanos es la del típico pueblo alpujarreño, con calles tortuosas y empinadas adaptadas al terreno irregular y de bastante desnivel, y casas encaladas con terraos y tinaos y rodeadas por tierras de labranza y montañas.

Todos aquellos que realmente deseen pasar unos días en total desconexión deberían probar a hospedarse en esta zona. Hay multitud de senderos y caminos bien señalizados que comunican unas poblaciones con otras con lo cual es posible conocer a pie toda la zona disfrutando de la naturaleza, el ejercicio, el descubrimiento de lugares y rincones realmente pintorescos y, por supuesto la sencillez y la cercanía de la gente. Paso a mostraros imágenes de cada uno de estos lugares para que cada uno elija el suyo.

Atalbéitar

Dice la Wikipedia que su nombre procede del árabe harat albáyṭar cuyo significado es “barrio del veterinario”. Es una población muy pequeña, en torno a un centenar de casas, y a poco que te descuides ya estás fuera de él. Pero en eso reside su encanto, es como una miniatura y en sus estrechas calles las construcciones típicas de La Alpujarra nos hacen pensar que las casas se amontonan unas sobre otras a través de los terraos y creando adarves y pasajes que nos resguardan del sol y de la nieve, los cuales son herencia 100% morisca. A nivel constructivo es uno de los pueblos más puros conservando la mayoría de los rasgos que definen esta arquitectura. La mayoría de las calles confluyen en la plaza, punto de reunión de los escasos 30 vecinos censados que al rumor de su fuente de tres caños ven la vida pasar. Está situada a 1.150m de altitud.

Ferreirola

Ferreirola está situada en la margen derecha del río Trevélez, a 1.002 m de altitud, y es uno de los asentamientos más antiguos del municipio de La Taha, ya que data de época romana. Semioculta entre barrancos; de lejos sólo la torre de su iglesia nos da una pista de su presencia. Pero una vez llegamos, bien a pie o bien en coche descubrimos un pueblo insospechado. Su estructura urbana es notable y están presentes las estructuras típicas de estos pueblos, un lavadero público, (hoy ya en desuso), una fuente pública donde refrescarnos, rinconcitos con tinaos, terrazas llenas de flores, placitas. Algunas de las casas más grandes tienen su terreno de huerto de cuyos muros sobresalen limoneros, caquis y jazmines. Rodeada de campo, Ferreirola es una encrucijada de caminos entre Atalbéitar, Mecina y Busquístar, por aquí transcurre el sendero medieval (un sendero de 21 kilómetros utilizado por los lugareños desde hace más de 700 años para comunicarse con Pórtugos, Pitres, Atalbeitar, Busquístar, Nieles o Juviles) y el GR-240 entre otras rutas.

Mecina

Mecina es el núcleo principal del antiguo municipio de Mecina-Fondales, que se componía de tres pequeños pueblos: Mecina, Mecinilla y Fondales. Es el segundo pueblo en extensión y población del municipio de La Taha. Mecina está construida en torno a una era común, y sus calles se extienden desde aquí hacia abajo. AL igual que Mecinilla, y Fondales, conservan un grado de autenticidad arquitectónica muy grande.

Mecinilla

Barrio colindante a Mecina, pero con carácter independiente. Aparece en la Edad Moderna como una agrupación de 15 ó 20 casas. Muy cuidado, coqueto y totalmente respetuoso con la arquitectura tradicional es el lugar perfecto desde donde conocer los otros pueblos de la zona.

Fondales

Es el pueblo que está más en lo «hondo» (de ahí su nombre), quizás el menos accesible. Su arquitectura apenas ha sufrido cambios, en él hay infinidad de tinaos o porches tradicionales y una pureza de rasgos que le hacen ser uno de los más visitados. Fondales es la población donde Gerald Brenan fijó su residencia de verano.
Tiene un magnífico puente medieval sobre el río Trevélez. El camino que lo atraviesa es la antigua ruta oficial desde Órgiva y da acceso a dos grandes aljibes. Asímismo hay una fuente de aguagria. El pueblo tiene muchos caminos que llevan hasta él, desde Mecinilla que lo conecta luego con Mecina y más arriba con Pitres, o hasta la zona de Órgiva, y el río Guadalfeo. Otro camino muy interesante, es el que nos lleva por la Fuente Agria hasta Ferreirola. Sus eras, poco conocidas, son parte del legado que nos dejaron los habitantes de estas tierras y que hoy conservan con primor sus descendientes.

Capileirilla

Es el núcleo más alto del municipio (más de 1400m) , con unas vistas excepcionales de toda La Taha. Su fisonomía conserva los elementos característicos de la arquitectura alpujarreña. Aunque pequeño, el pueblo conserva todos los elementos propios de un núcleo de población: bien comunicado por un camino desde Pitres, otro por los Aylacares, y dos más que lo unen con Bubión (hoy a través del GR-7), y un último hacia la sierra. En la parte alta del pueblo, junto al hotel, hay un observatorio astronómico.

 

Pitres

Es la capital y centro geográfico de La Taha, siendo el núcleo más grande y más poblado de todos los pueblos que la componen. El pueblo se estructura en varios barrios articulados en torno a una gran plaza, que antiguamente fuera «plaza de armas» en la guerra de rebelión de los moriscos en el siglo XVI. Actualmente, en ella se alza la iglesia construida sobre los cimientos de la antigua mezquita, y de cuyas formas destaca su esbelta torre que personaliza Pitres.