Esta es una pregunta que los lectores me hacen reiteradas veces, y la respuesta, teniendo en cuenta las dimensiones del país, ( 814.578 kilómetros cuadrados, repartidos entre Tracia Oriental, en Europa, y la Península de Anatolia, en Asia) no es única, ni corta, así que pienso que ya es momento de estudiar en profundidad la respuesta. Turquía es un país muy amplio que disfruta de varios climas distintos, según la zona, aunque en su mayor parte tiene clima mediterráneo, con veranos cálidos y secos e inviernos suaves y lluviosos, sobre todo en las zonas de los mares Mármara, Egeo y Mediterráneo.

A modo de resumen en la zona del Mar Negro el clima es subtropical con veranos cálidos e inviernos suaves. La temporada de playa transcurre entre los meses de junio y septiembre en la costa del mar de Mármara y norte del Egeo. Entre abril y finales de octubre en el Sur del Egeo y Mediterráneo. Anatolia Central tiene un clima continental con veranos calurosos y secos e inviernos fríos. El este de Anatolia es de veranos suaves e inviernos largos y fríos y en la zona Sudoeste de Anatolia se disfruta de veranos calurosos e inviernos suaves y lluviosos.

De modo general podríamos decir con poco margen de error que la mejor opción es apostar siempre por el otoño o la primavera para descubrir los principales rincones del país, dejando el verano exclusivamente para las aquellas zonas costeras donde predomina el turismo de sol y playa. La excepción a este consejo sería el norte y el este del país, aquí es mejor optar por el periodo de verano para no pasar mucho frío durante la estancia.

 

La costa occidental de Turquía

Las costas del Mar Egeo cuentan historias mitológicas mientras que la suave brisa marina nos recuerda que estamos ante uno de los paraísos de Turquía. Desde Aso, hasta Izmir, se puede disfrutar de un fascinante paisaje que incluye verdes colinas, idílicos pueblos de pescadores e increíbles yacimientos arqueológicos, testimonios de una herencia de más de 5.000 años de historia, cultura y mitología.

Para visitar la costa turca bañada por el mar Egeo, lo más recomendable es seleccionar el período que comprende de marzo a octubre. Izmir, cuna de Homero ( Esmirna) , Éfeso, Pérgamo o Bodrum, son algunas de las ciudades más atractivas del este del país. Es el mejor momento para descubrir la tercera ciudad del país, Esmirna, también conocida como “la perla del Egeo” la ciudad más occidentalizada y moderna de Turquía, donde además tiene lugar su festival internacional de las artes, o de pasear sin multitudes por la magnifica ciudad romana de Éfeso, o por la espléndida acrópolis de Pérgamo.  Además de huir del calor, también huiremos de la masificación turística.

 

La costa norte de Turquía, el Mar Negro

Desde la frontera con Bulgaria, hasta la frontera georgiana, densos bosques de pinos y una exuberante vegetación cubren las cimas de las montañas. A lo largo de la línea costera, hermosas playas despobladas se extienden kilómetro tras kilómetro invitando a tomar el sol, a nadar y al descanso.

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Karadeniz que es el nombre con el que los turcos se refieren al mar Negro. Esta región verde y natural del país no ha sido aún víctima del turismo masivo, por lo que ha quedado reservada para los propios turcos y pocos extranjeros. Aquí podrás encontrar antiguas colonias griegas, escondidos monasterios bizantinos, sombrías fortalezas otomanas y, sobre todo, pequeños pueblos turcos, un paraíso para quienes deseen conocer una Turquía auténtica a la par que atractiva.

 Si la idea es visitar la costa del mar Negro, entre abril y septiembre es la mejor época para disfrutar de un clima agradable. Septiembre es además un gran mes para para los que busquen las huellas de la historia pues estaremos en una zona cuna de civilizaciones antiguas y monumentos, con una riqueza arqueológica de primer nivel cuando el calor es menos sofocante y hay aún menos afluencia de turistas.

Los meses de verano, son los mejores para los amantes del senderismo o los interesados en  descubrir los montes Kaçkar. Si el destino es Inegolu, Ordu, Sinope, Trebisonda,  Kocaeli o Amasra, debes saber que tendrás veranos frescos e inviernos suaves.

 

Estambul

Estambul tiene un clima templado continental. La temperatura media anual en Estambul es de 14.1 °C, similar a la de Madrid, por poner un ejemplo, sin embargo hay que considerar que debido a su gran extensión el clima puede variar según te encuentres en el norte o en el sur.

Cualquier época del año es buena para conocer la ciudad más apasionante de Turquía, si bien, si hay que decantarse por alguna estación, el otoño y la primavera son las mejores porque las temperaturas son más benignas. Hace buena temperatura aunque te pueden sorprender algunos días nublados y lluviosos. Desaconsejo viajar en invierno, el invierno es demasiado frío (frío en mayúsculas), con un viento gélido que azota sin piedad, y donde la nieve no es inusual.

El verano, demasiado caluroso, os puede desmotivar a pisar la calle. De todos modos, con Estambul nunca se sabe, podéis tener una primavera lluviosa y fría, (yo he estado en abril y aun nevando), y tener un mes de junio supuestamente suave achicharrante, totalmente inesperado. No recomiendo en absoluto el mes de agosto ya que al excesivo calor se le suma la humedad del Bósforo obteniendo una sensación térmica de bochorno.

 

El centro del país, Anatolia Central

La Región de Anatolia Central, es una de las cunas de la Humanidad, uno de los enclaves históricos más importantes de Asia y Europa. Con el pasar de los siglos, muchos han sido los pueblos que han amado y disputado estas tierras.

En líneas generales, la Capadocia corresponde al clima continental, lo que significa inviernos fríos y veranos calurosos. La primavera en cambio, es bastante suave, con temperaturas diurnas muy agradables, y algo más de fresco por la noche. También los meses de septiembre, octubre y noviembre son perfectos para conocer esta región ya que en diciembre, enero y febrero las temperaturas pueden resultar demasiado gélidas y el verano suele ser seco y abrasador. Para que os hagáis una idea: enero es el mes más frío con máximas de 7ºC durante el día y -3ºC durante la noche. Agosto es el más caluroso, con máximas de 32ºC de día y 15ºC durante las noches.

Por contra, los que decidan viajar en pleno invierno tendrán un paisaje precioso, ver la Capadocia nevada es algo que pocos hacen.

 

Anatolia Oriental, este del país

La región este de Turquía, tan desconocida, es la región de los amantes del senderismo, montañas, mesetas, deportes en la naturaleza como el esquí o el rafting. Se puede visitar prácticamente durante todo el año, pero preferiblemente escoge mayo y junio, o septiembre, evitando julio y agosto para viajar con más tranquilidad. También puedes ir entre diciembre y abril si quieres practicar distintos deportes de invierno.

Diego Delso | Wikimedia

 

La costa sur

La costa turquesa, o costa licia se presta tanto a visitarla en verano, pensando en disfrutar del sol y la playa, como el resto del año si queremos temperaturas más suaves que nos permitan hacer senderismo o realizar turismo cultural sin agobios. La región mediterránea, bañada por la luz del sol durante 300 días al año, es un paraíso que invita a nadar, tomar el sol y practicar deportes como el windsurfing, el esquí acuático, la vela, el montañismo y la espeleología. Habitado desde el periodo paleolítico, el litoral ha visto desaparecer numerosas civilizaciones y ha conservado los vestigios de cada una de ellas. El paisaje en esta zona es espectacular, verdes bosques de pino, aguas cristalinas, restos arqueológicos licios y antiguas ciudades hundidas en la isla de Kekova. Kas, Myra, Phakelis, Fethiye, Antalya  o los 18 kilómetros de playa de Patara son un reclamo más que suficiente para cualquier viajero.